¿Cómo organizar un cumpleaños consciente en plena pandemia Covid?

Cumpleaños de bebote
CONSCIENTE E IMPERFECTO

Y todo comenzó…cuando…

…Escribí que quería ser madre en mis deseos de Fin de año de 2018. Jamás pensé que se fuese a materializar ese deseo tan rápido. Pues en Mayo 2019 Milán se materializaba en forma de ovulo fecundado. Y el 1 de Julio me hacía prueba que confirmó su llegada. Tras esa confirmación se venían por delante meses de máxima felicidad y disfrute por ser su hogar uterino. Por ser su fuente de amor, a través de mi implicación y actitud proactiva para contribuir a que su bioquímica estuviese bañada de mucha serotonina endorfinas y oxitocina jiji… reduciendo al máximo el cortisol. Tarea que no fue fácil, pues la vida nos puso mil pruebas durante todo el embarazo para poner en práctica mis años de crecimiento y trabajo personal. Si quieres saber más de cómo fue mi embarazo, los problemas que tuvimos y las herramientas que usé para superarlos con empoderamiento puedes leerlo  aquí

Los niños que fuimos mamá y papá de Milán, y Milán manifestándose en la prueba que marcó el antes y el después de nuestra vida.

Y tras esos meses de tenerlo dentro de mi. Llegó él, con su kilo y medio pisando fuerte. Trayendo debajo del brazo no solo un pan (al conseguir tb en Julio 2019 mi plaza como funcionaria de carrera, estando él en barriguita ya) sino muchos aprendizajes y pruebas con su prematuridad. Y ya pasó un año, ya pasaron 365 días girando alrededor del sol.

Su primera vuelta al sol.

La primera vez de “algo” siempre suele ser relevante. Quizás por eso, quise, a pesar de las circunstancias que nos está tocando vivir en plena pandemia mundial, que su primera vuelta al sol fuese igual de especial que si hubiésemos hecho una fiesta con toda la gente que lo quiere y nos quiere. 

Quería honrar cada día que nos hemos ido conociendo y superando juntos los desafíos.

Y para eso me propuse firmemente a hacerle su cumple Imperfecto y CONSCIENTE.

Imperfecto porque no estaban las personas que lo quieren con él. No hubo fiesta compartida. Y CONSCIENTE, porque más allá de las celebración festiva que supone un cumpleaños. Desde mi forma de verlo, cumplir años ha de ser algo que se celebre también a nivel simbólico, dejando huellas y recuerdos para el SER.

Siempre he dado mucha importancia al Ser, de echo es uno de mis mantras es

SER-HACER-TENER.

Y con ese mantra filtro muchas cosas en mi vida y en la crianza con Milán. Me guián en muchas decisiones que tomo.

Preguntándome a menudo: al hacer “equis”, estoy cultivando en Milán el SER o sólo el hacer y/o tener.

Cuando me puse a idear su cumple, ¡pensé!

¿Cómo puedo hacerle un cumple que cultive la energía del SER? 

¿Cómo hacerle un cumple sensorial y simbólico?

Cómo hacer para que los adultos que estemos (papá y mamá finalmente por las restricciones) también conecten con sus niños interiores. Pues para conectar con la energía de los bebés hemos de tener presente al bebé/niño que fuimos. Y esa puerta al inconsciente se abre entre otras formas, haciendo como si fuésemos niños de alguna forma. Y jugar, hacer cosas que abran los sentidos, es la mejor forma para conectar con ese niña/o que fuimos-somos.

Pero no solo quería que el cumple rozara el corazón de su papá y mío. Sino que…

Quería dejarle un legado emocional de su primer año de vida.

Con la intención de que cuando crezca pueda ver y sentir lo que supuso para nosotros su primera vuelta al sol. No solo porque vea unas fotos. Sino porque podrá tocar detalles con mucho significado y que darán estructura a su mundo interior. Para que el Milán de adulto tenga su caja de recursos del bebé/niño que fue.

Y de esas preguntas, reflexiones que me hice, surgió una lluvia de ideas. Que finalmente quedaron de la siguiente forma.

Ver amanecer en terraza que tanto le gusta.

  1. Preparar con bebote el desayuno: postres ricos, revuelto, batido fruta. Acorde a sus gustos culinarios
  2. Desayunar en terraza. Somos unos disfrutones de la terraza.
  3. Hacer tres puzles de fotos de Milán
  4. Cuadro para pintar con dedos: Milán, mami y papi
  5. Árbol de los deseos: escribir en notas de papel cosas que deseamos para él. Y que podrá leer cuando aprenda a leer.
  6. Cuadro de un trozo del Universo el día que nació. (Solo necesitas saber fecha nacimiento y hora de la persona, aquí la web donde la hice: https://magicalnightsky.com
  7. Ir a la playa a gatear por la arena, bañarse en charco.

Todo eso se hizo unos días después de su nacimiento el 20 de Enero, elegimos el domingo 24 de Enero 2020 para festejar los tres juntos.

Te dejo algunas fotos para que veas lo sencillo y bonito que fue. Al verlas me sale la alegría del día tan bonito que vivimos, a pesar de las circunstancias. Porque sí, a pesar de los desafíos, podemos saborear ratitos de felicidad.

Mesa del cumple-desayuno, el domingo 

Mesa del cumpledesayuno 

Árbol de los deseos

                                                                         Papi escribiendo deseos para…   El árbol de los deseos…

Pintando cuadro, entusiasmado…

Después del momento Picasso, tocó baño en la marea que tanto le/nos gusta…

Cuadro del trozo de Universo en el preciso instante en el que Milán nació…

Un regalo, muy simbólico, que le acompañara toda su vida. 

El mensaje que le pusimos en el cuadro fue:

“Milán, el Universo habita en ti, cree en ti, en tu poder personal para brillar. Mamá y papá te quieren. Gracias por elegirnos y ser nuestro hijo.”

Pero además, el mismo día que nació, 20/01/20, que cayó un miércoles. realicé algunas acciones con el fin de sanar una herida emocional que tenía abierta, para transformarla en consciencia…

…El día que Milán nació me lo quitaron rápido de mis manos, mi piel, mi corazón, para llevarlo a neonatos por nacer prematuro. No lo vi hasta el día siguiente. Gracias a libros leídos y formaciones, sabia que era una herida profunda aunque en aquellos momentos viviera como algo que había que aceptar, por su seguridad.

De echo en todo su primer año de vida, recordar eso, era de las cosas que más me emocionaban, sabía que era la señal de que había que sanar, mirando herida, curando y dejándola secar al aire, libremente y por eso, durante todo ese primer año con Milán, expresaba mis emociones sin negarlas, en mi zona de seguridad, con mi pareja. Pero, también, sabía y sé que para curarme heridas emocionales más profundas he de hacer algo, simbólicamente, tomar acción, no solo intelectualizar,  analizar con la mente y/o expresar verbalmente o escribiendo. El inconsciente funciona mejor con lo simbólico. Y por eso el miércoles hicimos Milán papá y mami un acto simbólico de Re-nacimiento y su cumple Montessori.

Ceremonia Montessori… Fue muy bonito para nosotros como adulto, por lo simbólico del proceso, elaborarlo, prepararlo, y para bebote también, al ver sus fotos, tocar su bloque de madera que simboliza su primer añito… Me encanta hacer cumples así, pues para los niños/as es menos abstracto el acto de cumplir años. 

El acto de Re-nacimiento hicimos como si pariera de nuevo a Milán, como un juego, como cuando los niños repiten jugando lo que les ha pasado. Lo hacen para RE-elaborar situación y descargar, soltar, o relajar.

Pues con mi pelota de yoga que usé en parto en hospital, con mi camisón del hospital y semidesnuda Milán “volvió a nacer” desnudo y esta vez, sí lo pude pegar a mi cuerpo y a su tetita sin que nadie se lo llevará. Para después levantarnos y bailar la canción del ciclo de la vida que formó parte de su blessing wey, (en otro blog compartiré cómo fue esa ceremonia de embarazo). Mientras, eso sucedía un sol irradiaba sus últimos rayos, pues fue a las 6.35 (hora exacta que nació) cuando Re-nació y se encontró con su mamá.

Tras renacer mami y Milán 

Fue un acto MARA-villoso.

Donde lloré y reí.

Sentí que unos trozos de mi se recolocaban

Y sin mayor razonamiento lógico. Te diré, que desde ese día, 20/01/21. Cada vez que RECUERDO su nacimiento, lo primero que me viene ahora es lo vivido en esa “ceremonia-acto simbólico” y la cascada de emociones de alegría, y lo vivido realmente me viene pero con un sentimiento de paz. El miedo ya se disipó. La oscuridad de aquel momento, de supervivencia enmascarando MIEDO, ha dejado paso a alegría, todo se recolocó, y la angustia ha perdido fuerza.

Me RE-concilié con ese instante en el que se llevaron a Milán. Y si te fijas la vida tb va d eso de RE-hacerte, Re-conectarte, Re-nacer, Re-intentar. Mientras haya vida puedes volver a RE-hacer lo que necesites para sentirte en paz.

Sin más, dar Gracias…

Gracias hijo mío por tantos aprendizajes en el primer año de vida juntos.

Gracias vida por ofrecerme estas experiencias tan brutalmente espirituales, que me ayudan a crecer

Gracias a los libros que leí y a cada una de las formaciones que me ha permitido mirar mi SER y mi EGO para que me sume y no limite tanto.

Gracias a mi pareja Isaac, por participar en mis necesidades emocionales, y abrirse a descubrir.

Gracias a mi madre por apoyarme

Gracias a MI por ser valiente y salirme de los patrones

Gracias a cada menor que pasó por mi vida laboral. Ellos me enseñaron el 🎭 arte del juego emocional. Y que sanar el alma va de permitirse ser niña/o.

Y gracias a TI, por leerme. Quizás te pueda servir, algo de lo leído en este blog IMPERFECTO Y CONSCIENTE, en algún momento. Gracias.

Gracias Vida, vidita mía.

Deseo que cada vuelta al sol que des, te liberes de alguna carga, para que vueles ligera en tu vuelo.

Para terminar…

Te animo a que apuestes por tu crecimiento personal, por tu autocuidado, por crear tus propias herramientas de consciencia y gestión emocional. Es más sencillo de lo que parece…se trata de cultivar tu SER para volver a nuestro interior y escuchar nuestro cuerpo.

Acompáñame en este blog e irás descubriendo mis herramientas, mi forma de transitar mi vida como…

MUJER, MADRE Y PROFESIONAL…

 …estoy segura que muchas cosas te podrán servir o inspirar…las comparto para sumar en lo posible.

Suma +

Emocional Coach

Mara Vizcaíno

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